martes, 28 de marzo de 2017

ORTEGA Y GASSET - documental - la 2

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lunes, 20 de marzo de 2017

Epicuro | Por Darío Sztajnszrajber

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domingo, 19 de marzo de 2017

Charla completa: ¿Qué es la identidad?

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LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN COMO UN DERECHO HUMANO - NO ME PIENSO CALLAR

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Cortina, A. (2014) ¿Qué es y para qué sirve la Ética?

Adela Cortina ens recorda que "si no prenem nota del preu que cal pagar i pel que surt la falta d'ètica, en diners i en dolor ... El cost de la immoralitat seguirà sent imparable. I encara que soni a tòpic, seguiran pagant-ho sobretot els més febles ». Cap societat pot funcionar si els seus membres no mantenen una actitud ètica. Ni cap país pot sortir de la crisi si les conductes antiètiques dels seus ciutadans i polítics segueixen proliferant amb tota impunitat.

https://www.casadellibro.com/libro-para-que-sirve-la-etica/9788449328770/2100086



"Adela CORTINA ORTS, ¿Para qué sirve realmente la ética?, Editorial Paidós, Madrid, 2013, 180pp., ISBN: 978-84-493-2877-0 Maria Medina-Vicent Becaria Predoctoral en el Departamento de Filosofía y Sociología de la Universitat Jaume I, Castelló de La Plana, España medinam@uji.es

 ¿Para qué sirve realmente la ética? es la última obra de la filósofa Adela Cortina, galardonada con el Premio Nacional de Ensayo 2014. Se trata de un trabajo en el que la reflexiona desde una perspectiva moral, sobre las acciones y las dinámicas que nos han llevado a la situación de crisis y desafección ciudadana actual. Al mismo tiempo que efectúa una cruzada por la recuperación de valores morales como la justicia y la igualdad, tan básicos para construir ciudadanos/as decentes, como instituciones justas y fiables. Al fin y al cabo, ambos son componentes centrales de las sociedades democráticas, en la que distintos proyectos de vida puedan convivir, a la vez que se tiene en cuenta a los más vulnerables. La obra da comienzo con el capítulo Abaratar costes y crear riqueza, partiendo de las condiciones económicas, políticas y sociales actuales, caracterizadas por la crisis económica y una desconfianza generalizada de la ciudadanía en los actores políticos, la autora pone de relieve que ahora más que nunca la ética es rentable. En el marco social, el establecimiento de compromisos y la confianza se convierten en el eje central de las relaciones, cuando ambos valores son vapuleados, se generan sociedades con grandes sufrimientos. Cultivar la confianza como uno de los recursos morales más importantes de nuestras comunidades, permitiría según Cortina, “que nuestro mundo sea más económico en dolor evitable y también en dinero” (p.14). Un principio importante para cumplir con esta tarea es reconocer que no todo es justificable, y los “vacíos éticos” (p.23) que han servido para que prolifere la corrupción en diferentes ámbitos profesionales, no se pueden seguir incentivando. Por tanto, se debe dejar atrás la idea de que “la economía sigue su curso sin que le perjudiquen la codicia o la insolidaridad” (p.19), y reivindicar el carácter moral de las instituciones 866 SEPTIEMBRE 201 5 |

Reseña económicas y políticas, porque solamente así dichas entidades reconocerán la responsabilidad social de sus acciones y decisiones. Y es que, personas, organizaciones y gobiernos, pueden estar altos o bajos de moral, como señalaba Ortega y Gasset (p.19), actividades como la inversión de fondos en la industria bélica, resultan un claro ejemplo de esto. Consecuentemente, estar altos de moral, debería ser el objetivo central de cualquier persona e institución social que se precie. Labrarse un buen carácter es el objetivo del capítulo dos, donde Cortina nos recuerda “que la moral tiene algo que ver con no dañar, pero no siempre y no sólo con eso; también con no defraudar la confianza” (p.31), porque el cumplimiento de las promesas se refiere también a ser moral. Las decisiones que tomamos a lo largo de nuestra vida nos permiten adquirir ciertos hábitos, que se tornan virtudes o vicios según su naturaleza. La palabra ética, nacida del griego “ethos”, se refiere pues al carácter que forjamos en nuestro madurar, para cumplir con el fin mismo de la vida humana. Mientras que la moral, del latín “mos-moris”, se refiere al carácter, costumbres y usos, pero también a la morada en que habita el individuo (p.34). De este modo, la ética trata de “la formación del carácter de las personas, de las instituciones y de los pueblos” (p.34). De esta manera, la ética tiene sentido porque nos permite ser conscientes de que tanto personas como instituciones tenemos la capacidad de cambiar (p.38), desde nuestra libertad podemos escoger entre diferentes cursos de acción. Forjarse un buen carácter es uno de los fines mismos de la vida, cultivar hábitos que sean positivos “a través de la educación es lo que requeriría una educación de calidad” (p.41). Porque la ética nos transforma internamente mediante el obrar bien, por eso la cosmética que intenta maquillar los vicios, acaba mostrándose antes o después (p.45), desvelando los verdaderos motivos de nuestro actuar. Así, la ética sirve para forjarse un buen carácter, que cultive las virtudes y aleje los vicios, permitiéndonos ser felices y justos (p.46). El capítulo tres titulado Querer cuidar, destaca un rasgo fundamental de los seres humanos, que a veces tendemos a olvidar: su vulnerabilidad. Como seres sociales, necesitamos irremediablemente de los otros para poder sobrevivir. Cuidar de los que nos rodean es una obligación moral que demuestra cuán interdependientes somos, un hecho que “destroza desde hace mucho tiempo la leyenda del individualismo egoísta” (p.51). De todas formas, el cuidar supone caminar hacia un mundo más humano, pero también más sostenible, porque cuidarnos entre nosotros, permite tomar conciencia de la necesidad de preservar el 867 SEPTIEMBRE 201 5 |

 Reseña entorno en el que vivimos (p.57). Incorporar la ética del cuidado como una base irrenunciable de nuestra conducta y de nuestras sociedades es algo que conseguimos a través de nuestra capacidad para valorar lo bueno y dis-valorar lo malo. La naturaleza y sus seres tienen “un valor que nos obliga a no dañarles y a tratarles con cuidado” (p.61), así, como sujetos morales con derechos, debemos ejercitar tanto nuestro “yo-social” como nuestro “yo-ecológico” (p.64). En resumen, nacemos como seres vulnerables y dependientes, por eso el cuidado y la compasión por los otros, es lo que nos permite desarrollarnos en plenitud junto a las personas que estimamos y conservar el mundo en el que vivimos, porque “tenemos la capacidad de extender el cuidado más allá de la línea de los hijos y del parentesco, la capacidad de llegar a los lejanos en el espacio e incluso a los extraños” (p.66). Transitar del egoísmo estúpido a la cooperación inteligente, es la tarea que se nos propone en el cuarto capítulo, donde la cooperación se destaca como uno de los principios básicos de funcionamiento de la vida social. Debido a la racionalidad maximizadora heredada del mundo económico, “nos hemos acostumbrado a creer que actuar racionalmente significa tratar de maximizar el beneficio sin más, a cualquier precio” (p.78). Sin embargo, la figura del homo oeconomicus debe ser enfrentada a la del homo reciprocans, categoría con la que se subraya el carácter cooperativo de las personas. En este sentido, el altruismo, que supone para el individuo invertir parte de sus recursos para favorecer la adaptación de otro (p.81), implica una intención de recibir, por eso “cuando hacemos algo esperamos retorno, la reciprocación es la base de la cooperación” (p84). Al fin de cuentas, los grupos humanos que han sobrevivido lo han hecho gracias a su capacidad de crear lazos internos, “pactos de ayuda mutua con todos aquellos que nos son necesarios para sobrevivir y prosperar” (p. 86). Dichos pactos suponen el compromiso de cumplir las normas morales de la comunidad, pero hay que tener en cuenta que dicho cumplimiento debe venir del convencimiento y el compromiso personal. Más allá de recurrir a la vergüenza social (p.88) o a la mejora moral con tratamientos biomédicos (p.91), se deben promover las convicciones morales a través de la educación, mediante la búsqueda de unos mínimos morales que nos permitan construir sociedades justas, y esto pasa por no excluir del pacto a aquellos que no pueden devolver nada a cambio. Así, la ética nos sirve “para recordar que es más prudente cooperar que buscar el máximo beneficio individual” (p.93). 868 SEPTIEMBRE 201 5 |

Reseña Para Conquistar solidariamente la libertad debemos saber de qué tipo de libertad estamos hablando, no se trata de la libertad entendida como independencia, ya que ésta no atiende a responsabilidades, y porque “hacer sin mirar a quien se daña, no es libertad” (p.100). Por esta razón, no hay que confundir individualismo con egoísmo, porque la libertad como independencia se conquista y quien la reclama para sí, se compromete a reclamarla para los demás (p.103), de cualquier otro modo, este ser acabaría preso de su egoísmo. Poder decidir cómo vivir nuestra vida, o cómo utilizar/aprovechar los recursos que tenemos cerca para hacer nuestro camino, resulta esencial, porque aunque la libertad no garantice una vida buena, al menos nos otorga la posibilidad de intentarlo. Por esta razón, las libertades básicas tienen carácter irrenunciable y han de ser “reconocidas a todos sin excepción” (p.101). En este sentido, Cortina destaca la libertad entendida como participación, que se refiere al “derecho a participar en los asuntos públicos” (p.108), que las decisiones que afectan a todos/as en una misma comunidad política no sean tomadas por unos pocos, sino por todos los afectados. Al mismo tiempo, nos remite al filósofo Kant y su «Reino de los fines», que nos recuerdan que la confusión entre valor y precio que se ha venido desarrollando en los últimos años, ha permitido que triunfe “la razón instrumental, que lo convierte todo en medio para otras cosas” (p.111). Recuperar la noción de un espacio en que cada ser humano sea entendido como fin en sí mismo, permitiría construir una “sociedad sin dominación y, por lo tanto, una sociedad sin humillación” (p.113). La felicidad humana “no viene tanto del ejercicio de facultades portentosas como de una vida buena” (p.116), y esta vida buena implica saber Reconocer y estimar lo que vale por sí mismo. A través de la lectura del capítulo sexto, entendemos que reconocernos en los otros nos permite amar y construirnos como seres humanos, protegemos aquello que consideramos valioso, y buscamos el aprecio de los demás constantemente, porque sabemos que esto nos va a permitir vivir de forma plena. Por eso, desde bien pequeños “a través del lenguaje vamos aprendiendo ese juego de las normas con el que las sociedades buscan proteger aquellas cosas que consideran valiosas” (p.121), como por ejemplo el respeto por la dignidad de las personas, así como la compasión. Estos son sentimientos que fundamentan los Derechos Humanos y legitiman la exigencia de su cumplimiento en cualquier lugar del mundo. También nos permiten desarrollar la empatía, tan necesaria para poder comprender el sufrimiento de los demás, para sentirnos obligados moralmente a remediarlo y actuar frente a él. Desarrollando este tipo de sentimientos y promoviéndolos en nuestro entorno, 869 SEPTIEMBRE 201 5 |

Reseña demostramos nuestra humanidad, ya que “no podemos sentir compasión por los que nos resultan indiferentes, sino sólo por los que de alguna manera nos importan” (p.124). En el capítulo siete (Ser profesionales, no sólo técnicos), se profundiza en un rasgo central de nuestra sociedad: el predominio de una cultura científico-técnica que ha provocado que solamente se conciban las mejoras sociales a través de la investigación científico-técnica (p.130). A la larga, este tipo de cultura ha dificultado que diferenciemos entre lo que son buenos profesionales y lo que son simples técnicos, así, en estos tiempos de crisis “se ha echado en falta la presencia de buenos profesionales” (p.131), conscientes de que en el desarrollo de su actividad, no se están sirviendo a sí mismos, sino “a una tarea que les trasciende” (p.133). La distinción aristotélica entre acciones técnicas y prácticas, nos permite diferenciar entre las acciones que solamente valen en relación con el fin que se busca con ellas; y las que son valiosas por sí mismas, porque “encierran un bien que deseamos alcanzar” (p.134). Cada actividad contiene su propio fin, el cual le otorga sentido, por ejemplo, el fin de la empresa sería un fin social y no solamente económico. Esto supone que aquellas personas que se incorporan a la actividad, deben ser fieles a dicho propósito y no anteponer sus intereses individuales, no anteponer las acciones técnicas a las prácticas, porque “los motivos individuales no son razones, no se convierten en argumentos si no tienen por base las exigencias de la meta profesional” (p.137). La búsqueda de la excelencia en el desarrollo profesional y en nuestro día a día, supondría un respiro en estos tiempos de desilusión, ya que la virtud ejercitada por los excelentes repercute en la vida social de su comunidad (p.140). Construir comunidades justas es una de las cuestiones que se tratan a lo largo de toda la obra, y esto se consigue en la medida en que se pueda Construir una democracia auténtica, tema central del capítulo ocho. Y es que “el buen gobierno tienen buenos efectos para la vida de la ciudadanía” (p.143), el ejercicio de las virtudes se hace necesario para alejar los vicios como la corrupción. Para empezar, hay que tener en cuenta que los Estados nacionales modernos, no posibilitan la democracia congregativa, sino que “la ciudadanía moderna escoge a sus representantes y les encargan la gestión de la cosa pública” (p.147). Sin embargo, no resulta prudente dejar la gestión de la vida pública en manos de otros, ya que podemos acabar perdiendo también la privada. En esta línea, si la democracia es el gobierno del pueblo, y muchas veces pueblo es sinónimo de mayoría, resulta interesante conocer cómo se forman esas mayorías. Cortina nos ofrece tres modelos de democracia para explicar dicho proceso. En 870 SEPTIEMBRE 201 5 |

Reseña primer lugar, la democracia emotiva sería “aquella en que las mayorías se forman por manipulación de los sentimientos de los ciudadanos” (p.152). Se instrumentaliza a las personas, jugando con sus emociones para conseguir votos, hecho que atenta contra los principios básicos de la ética moderna, porque se convierte al pueblo en masa. En segundo lugar, la democracia agregativa reconoce la posibilidad de desacuerdos en sociedades pluralistas, no obstante, ante la imposibilidad de llegar a acuerdos absolutos, se opta por “sumar los intereses individuales y satisfacer los de la mayoría” (p.154), con lo que se entiende a los individuos de forma atomizada. En tercer lugar y frente a este modelo, surge la democracia deliberativa, que destaca la importancia del bien común, que los intereses de las personas se formen socialmente, la autonomía de los ciudadanos y el fomento de la deliberación social. Por último, la autora propone una democracia comunicativa que permita a la ciudadanía “forjarse una voluntad común en cuestiones de justicia básica, a través del diálogo sereno y la amista cívica” (p.155), deliberar sobre los mínimos de justicia en un diálogo inclusivo, porque el modelo más adecuado se define por “la participación del pueblo en los asuntos públicos a través de representantes elegidos, a los que pueden exigirse competencia y responsabilidades” (p.157). En el último capítulo, titulado Conjugar justicia y felicidad, Cortina nos da las últimas claves para conseguir llevar una vida plena, para ser justos y felices. En primer lugar, ser justos supone dar a cada uno lo que le corresponde (p.161), esto implica exigirnos mutuamente que todas y cada una de las personas respetaremos nuestros derechos. En cuanto a la felicidad, “nadie puede exigir a otros que sean felices de una manera determinada, sino que cada persona es la que ha de optar por un camino u otro” (p. 163). Cada cual vive su vida en plenitud de un modo distinto, porque si bien la felicidad es el fin mismo de la vida, cada cual se encamina hacia ella como cree más conveniente. En este aspecto, los Estados tienen la responsabilidad de garantizar las bases de justicia para que cada cual pueda decidir cómo ser feliz, y que no se impida a los demás hacer lo mismo (p.165). Con el advenimiento del mundo moderno, la felicidad comienza a entenderse como bienestar, como el “conseguir el máximo posible de bienes sensibles” (p.168), y ese estar bien se identifica con las posibilidades de consumo. Sin embargo, el consumo, más allá de referirse a la satisfacción de necesidades vacías, puede replantearse convertirse en una oportunidad para sacar adelante una vida feliz. Para esto, la autora propone aunar dos virtudes en nuestro carácter: lucidez y cordura. La lucidez nos permite ser conscientes de que “el ethos consumista no es natural, sino que está 871 SEPTIEMBRE 201 5 |

Reseña creado artificialmente, y que con él se pierden una gran cantidad de oportunidades felicitantes” (p.173). La cordura permite discernir entre el exceso y el defecto en nuestras prácticas de consumo, pero también en nuestra vida en general (p.174). Así pues, con el ejercicio de dichas virtudes, el sujeto podrá encaminar su consumo, para que contribuya a la felicidad propia y de los demás. Esta obra de Adela Cortina sirve como recordatorio a las personas de que somos capaces de escoger nuestro rumbo en la vida, y a las instituciones de la responsabilidad que tienen con para la sociedad. A lo largo de sus páginas, la autora muestra una enorme sensibilidad para percatarse de las necesidades morales de la sociedad, y señala de forma concisa los ámbitos de mejora donde todos/as debemos trabajar conjuntamente. Recordando también un hecho clave, y es que no existe el individuo aislado como tal, sino que las comunidades funcionan porque nos encontramos conectados los unos a los otros, somos seres dependientes y nuestra vulnerabilidad nos permite apreciar la importancia que tienen valores como la justicia, la felicidad y la cooperación. Como siempre, el trabajo de esta autora nos acerca al debería ser y nos alienta a no mostrarnos impasibles antes las injusticias, aportándonos la esperanza necesaria para alcanzar la meta suprema: ser felices en el seno de sociedades justas".

FONT: http://www.revistadefilosofia.org/66-26.pdf

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viernes, 17 de marzo de 2017

Conferencia: "Pensar con libertad" (Universidad de Navarra)

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LA FENOMENOLOGÍA TRASCENDENTAL de Edmund Husserl _ 3

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martes, 14 de marzo de 2017

La reducción fenomenológica

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E. Husserl: Objetos Ideales.

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Edmund Husserl: La conciencia

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lunes, 13 de marzo de 2017

El camino a la epojé

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domingo, 12 de marzo de 2017

E. Husserl: La Conciencia Intencional

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domingo, 5 de marzo de 2017

Husserl y la racionalidad de la cultura 2 de 2 video x flv

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Husserl y la racionalidad de la cultura 1 de 2 video x flv

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Grandes Filósofos - Edmund Husserl - Canal a

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Comentaris Facebookians a: Fernando Savater: “No veo por ninguna parte incitación al odio en el autobús de HazteOir.org"







Noticia clasificada en:Ideología de génerotransexualidad


El filósofo Fernando Savater, uno de los pensadores más destacados del panorama intelectual europeo, muestra en esta conversación exclusiva con La Tribuna del País Vasco, su opinión sobre la polémica que ha suscitado la puesta en marcha por parte de la asociación HazteOir.org de un autobús informativo con el lema “los niños tienen pene y las niñas tienen vulva”.

El autor de obras como “Aquí viven leones”, “Ética de urgencia” o “La aventura de pensar”, entre decenas de noveles y ensayos, se muestra contudente en una primera apreciación: “No veo la incitación al odio por ninguna parte”. Y añade que, efectivamente, el lema del autobús de HazteOir.org expresa desacuerdo con los postulados de la llamada “ideología de género”, entendida como mantener que el sexo no es una determinación biológica definitiva sino una opción voluntaria. “Pero estar en desacuerdo no implica odiar a aquel del que se discrepa ni incitar al odio contra él”.
Savater explica que, en su opinión, en este caso, lo que está a debate no es tanto la ideología de género como la diferencia de la actitud expresada socialmente ante el autobús de HazteOir.org y la campaña impulsada por asociaciones de apoya a los transexuales en las que se publicitaba que “hay niñas con pene y niños con vulva”. “A mí no me gusta ninguna de las dos campañas, porque no son temas para pasear por las ciudades de ese modo y mucho menos dirigiéndose a niños. En ambos casos, los lemas son simplezas para fanáticos. Pero si se acepta la campaña de apoyo a la transexualidad no hay mas remedio que aceptar también la contraria, so pena de practicar la libetad de expresión sólo con las opiniones que compartimos”.


Fernando Savater reconoce que la libertad de expresión puede estar en riesgo porque en estas cuestiones suele haber especial miedo a desagradar, sobre todo cuando puede irritarse a “grupos de presión ideológica especialmente susceptibles y camorristas”. “Las opiniones pueden ser erróneas, desagradables o disparatadas, pero no por ello pueden ser prohibidas”, explica el profesor, y concluye: “Respetar la libertad de expresión es permitir que se expresen las voces que más nos desagradan. Dejar hablar solo a quienes piensan como nosotros no es tolerancia sino proseletismo”.
- See more at: http://latribunadelpaisvasco.com/not/6155/fernando-savater-ldquo-no-veo-por-ninguna-parte-incitacion-al-odio-en-el-autobus-de-hazteoir-org-/#sthash.xFLRANki.dpuf









El profesor Fernando Savater no se deja arrastrar por la corriente de estupidez oficial y permanece como un español que mantiene activas sus neuronas al margen de la corrección política.
Sin entrar en lo oportuno del mensaje del famoso autobús (no estoy de acuerdo con mensajes que miran la infancia desde la óptica de la sexualidad adulta), resulta sintomática de la pobreza mental de España la condena irracional y sin argumentos que han lanzado las instituciones públicas sobre esta campaña de Hazte oír, desde el Ayuntamiento de Madrid a la fiscalía, los jueces, etc. Y la opinión pública, más aborregada que nunca, obedece sin molestarse en reaccionar contra este autoritarismo oficial.


El atobús ultracatólico

EL AUTOBÚS ULTRACATÓLICO
Escrito por  José Arregi

Como todo el mundo sabe ya por aquí, una asociación ultracatólica puso hace unos días en circulación un autobús color naranja sin ventana alguna. Su interior debe de ser muy triste, pues no tiene por dónde le entre el aire fresco de las mañanas ni la luz limpia de los atardeceres ni el verdor de los campos ni la risa de los niños. ¡Qué asfixia! Sus rótulos pregonan verdades y mentiras, grandes mentiras con medias verdades: “Los niños tienen pene, las niñas tienen vulva. Que no te engañen". "Si naces hombre, eres hombre. Sieres mujer, seguirás siéndolo”. Dicen defender la vida, pero solo defienden prejuicios y consignas. No tienen ojos ni ternura para el milagro de la vida siempre nueva y diferente. ¡Qué pena de autobús!
Pero fiscales, jueces, ediles y partidos han corrido en su ayuda prohibiéndole circular por “delito de odio” o por “incumplimiento de las ordenanzas de publicidad”. El odio es asesino, pero la prohibición a menudo no consigue sino darle aliento. Las ordenanzas están para ser cumplidas, salvo si su cumplimiento es contraproducente, como creo que sucede en este caso. Nunca pensó la asociación que iban a hacerse oír por tanta gente a un precio tan bajo: apenas una multa de 3.000 €. Pero mi desacuerdo con la prohibición no se debe ante todo a sus efectos contraproducentes, sino a un derecho humano básico, que muchos ultramodernos reivindican siempre para sí, pero para los otros solo cuando interesa: la libertad de expresión. Me repugnan las ideas de la asociación en cuestión, pero defiendo que las pueda divulgar. Dejad, pues, que circule el autobús, ordenanza arriba, ordenanza abajo.
Y, dicho eso, permitidme añadir algo más: más inquietante que la existencia y la propaganda de una asociación tránsfoba me parece que se sienta y de hecho esté amparada por la doctrina oficial de la Iglesia católica. Por una Iglesia que en el Estado español es financiada en buena parte con dinero público. Por unos obispos obsesionados con la sexualidad y, en los últimos tiempos, con lo que llaman “ideología de género”, de la que ellos son sin saberlo el exponente más claro.
Baste un ejemplo. Mons. Antonio Cañizares, cardenal arzobispo de Valencia, supuestamente traído de Roma para impulsar en España la primavera del papa Francisco, hace dos meses arremetió contra la “Ley integral del reconocimiento del derecho a la identidad y expresión de género” que se tramita en las Corts Valencianes, al igual que en otros parlamentos del Estado. Pero lo más penoso es constatar que el cardenal se limitó a citar textualmente frases del papa Francisco, que en el vuelo de regreso de Azerbayán habló de “la maldad que hoy se hace en el adoctrinamiento de la ideología de género”, y en el documento postsinodal Amoris Laetitia escribe: “esta ideología presenta una sociedad sin diferencia de sexo, y vacía el fundamento antropológico de la familia”, y en Georgia enseñó que hay “un gran enemigo hoy del matrimonio: la teoría del género” y que “existe una guerra mundial para destruir el matrimonio: no se destruye con las armas, se destruye con las ideas, existen colonizaciones ideológicas”.
Perdón, papa Francisco y tantos obispos, hermanos: pienso que Uds. no saben de lo que hablan, y que nada podrán entender mientras no sepan distinguir el sexo biológico (no siempre claramente definido), la identidad sexual (cómo percibo mi sexualidad corporal), la identidad de género (cómo me siento, hombre o mujer o en qué grado) y la orientación sexual (qué sexo me atrae). Hay quienes nacen con pene pero no son claramente niños, y quienes nacen con vulva pero no son claramente niñas. Y hay quienes son biológicamente niños, pero se sienten “niñas” en cuanto a los gustos y papeles que la cultura les atribuye, y quienes son biológicamente niñas, pero se sienten psicológica y culturalmente “niños”, y a veces de un género que no cabe en nuestros esquemas binarios). La biología, la psicología, la cultura los hizo como son. ¿Por qué los quieren encerrar en sus rígidos corsés “antinaturales”, Uds. que hablan de “ley natural” y la consideran como “voluntad divina”? La psicología y la cultura – y el género– también forman parte de la gran naturaleza que somos. ¿No les parece que lo natural y lo divino sería acoger y cuidar a cada niño o adulto tal como es, para que quiera y pueda ser realmente lo que es?
Haría falta otro autobús muy distinto para recorrer, reconocer, respetar la geografía humana en su amplia diversidad. Haría falta que jerarquías católicas y asociaciones ultracatólicas se pongan al día. Que escuchen a la gente. Que simplemente tengan los ojos abiertos a la vida, como ventanas abiertas al campo lleno de colores.
José Arregi





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Comentaris
Merce Martinez Caro Como lo va a ver si casi no tiene ojos, que pena de intelectuales????Mostra la traducció
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22h
David Paraire Brugués No dona, ell no mira amb aquest ulls... hahahaha
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Resposta22hEditat
David Paraire Brugués  Jo Merce Martinez Caro, trobo interessant i respectable la seva opinió, i això no vol dir que la comparteixi eh... Però trobo que estar d'acord amb el que agrada, no aporta res. Val la pena aguantar el rebuig de qui no opina com nosaltres, ja què aquests son precisament els que poden fer-nos pensar quelcom nou. No és tracta d'estar d'acord o no, i ser simples consumistes d'opinions amanides i alienes. Jo trobo més útil respectar les opinions diferents, y la diversitat. Excloure el que pensa diferent és totalitarisme. El totalitarisme és clar, fa perdre la nostra llibertat. Per això el dissentir és tan important com el sentiment. Precisament per diferir podem pensar. No  m'agrada pas apuntar-me a la simplicitat de les opinions superficials que més poden convenir-nos o agradar, a la lleugera. No valorar és no fer servir el cervell. Però podem diferir amb arguments. Diferir és el què jo trobo interessant. Si no hi ha un diferir no hi ha disrupció, i si manca això, res de nou a la ment...!
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Resposta21hEditat
Ana Martin Carmona Doncs jo no comparteixo la opinió d'aquest tant renombrat filòsof. Partim de la base, i en això ja qüestiono un dels seus arguments, de que la campanya LGTBI sobre que hi ha nenes amb pene i nens amb vulva, no és proselitisme, sinó informació. I aquesta informació es difon justament per una causa justa i necessària: acabar amb l'assetjament i violència que pateixen aquestes persones, aquestes que no entren dins dels cànon socials que vol mantenir vigents aquesta gent, la qual, l'objectiu principal d'aquesta iniciativa (força vergonyosa i "españoprofunda", per cert), no és donar a conèixer una realitat (informació), no és manifestar una opinió... L'objectiu subjacent és estigmatitzar a tot un col·lectiu i a les persones que li donen suport. Tu pots manifestar les teves creences, la teva opinió, els teus sentiments... però, fes-ho des del "JO", jo crec, jo penso, jo sento... En el moment en què t'estàs carregant els arguments d'un altre per fer valdre els teus, estàs manipulant, no estàs informant, i tots sabem cap a on manipula aquesta gent. Tots sabem d'on surten aquesta mena de "campanyes", i tots sabem el què pretenen. Dir que això és un acte de llibertat d'opinió, em sembla massa ingenu com per ser innocent. I aquests tipus de missatges no en tenen res de innocents. Surten de les entranyes del mateix monstre, el que diu que l'avortament és un assassinat, que les dones no haurien de votar, que haurien de ser submises, que el matrimoni gay acabarà amb la família, que les dones han de cobrar menys perquè són inferiors... No sé si som conscients del que tot això representa o pot arribar a representar. Jo sóc la primera que riu quan llegeixo les declaracions d'algun bisbe perquè em semblen tan anacròniques que no puc evitar veure-les ridícules. Però, es que darrera de tot això, darrera d'aquesta gent hi ha un poder que avança i no podem mirar-lo innocentment en nom d'una llibertat que nosaltres sí que ens creiem, però ells no. I si no actuem, sinó mostrem el nostre rebuig i ens manifestem en contra d'ells i a favor de les persones que víctimes d'aquesta forma tan limitada i retrògrada de pensar, si no ens posicionem els estem donant força, arguments i via lliure per actuar. El rebuig social actua de contenidor, i en iniciatives que surten d'aquesta gent, és molt necessari.
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Resposta
1
17h
David Paraire Brugués Hahahaha Ana Martin Carmona, ja t'esperava, i també trobo interessant i respectable la teva opinió. Però això ja ho saps. També, això no vol dir que la comparteixi eh... 


Jo, et reafirmo que trobo que estar d'acord amb el que agrada, no aporta res. També torno a dir que val la pena aguantar el rebuig de qui no opina com nosaltres. I, que diferir m’interessa. Jo detesto la multitud de monstres totalitaris, especialment els disfressats amb dogmes de llibertat, i que es valen de les pors irracionals de les persones, per dominar-los i fer-los seguir com ramats de bestiar ignorants, dependents, i sense esperit crític; i precisament en nom d'aquesta llibertat que temen perdre... 

Per això resulta, que veure la diferencia de la teva opinió amb la del filòsof... Pot fer-nos veure moltes coses... La primera, és la del primer comentari què he fet a la Merce Martinez Caro, "no mirar amb els mateixos ulls". En fenomenologia suspenen el judici per veure... Bé, el primer què es pot llegir, és dos discursos què no tenen la mateixa naturalesa. No poden coincidir de cap manera...! 

No és poden carregar-se un a l'altre el propi discurs, no parlen del mateix, exactament, però és relacionen perfectament superposats. El seu ordre és d'estrats diferents... Com és això?
Primer salta a la vista, d'un significant, neixen diversos significats discursius. Però en quin camp? Un sembla ser, creix en el camp de la ètica filosòfica... L'altre, sembla el camp de la ideologia o de la política... Si és això... Podem veure que la ideologia i la política segons un ordre lògic, han de néixer de l’ètica primer, i no a la inversa, cal despendre de tota creença a priori, això sembla molt clar, al menys si de veritat pretenem aquesta llibertat en comptes de poder... No confonguem conceptes i significats de certes paraules.

Per meditar però, cal pensar també, en la genealogia de la mirada del tema aquest, en estrats i en d'altres epistemes de la historia, i les diferents ordres i naturaleses de llibertats que cal tenir cura de no confondre i barrejar els sentits dels drets que volem tenir com a persones dignes,  sempre dins d´un equilibri de racionalitat de la cultura (ja sigui aquesta: Pràctica, tècnica o/i ideal), i dels drets i les llibertats humanes!

Llibertat i Dret d'expressió, sí. Llibertat i Dret d'opinió, sí. Llibertat i Dret de pensament per tots i totes, sí. Pels homes i dones de bona voluntad. Ja voldria jo, que aquesta bona voluntad suposada, fins que no es demostri el contrari, i per qualsevol persona, produís què hom procuri d'analitzar el seu discurs, pròpi o prestat. I tinc la convicció què és imprescindible la reflexió sempre,  la auto-reflexió per destacar, per deixar entreveure i criticar la pròpia  rigidesa, potser característica, i assenyalar la possible distorsió lògica en aquest tipus de pensament dicotòmic, apuntant al marc refeferente ideològic, en el qual es basa un discurs pre-fabricat adoptat. És aquell tipus de pensament absolutista que sempre contestarà o anirà a concloure el mateix, perquè és una postura de tall invariable, ja que no dóna peu a modificar la percepció d'un mateix, o el que s'espera de la situació i parteix de la premissa irreversible del que: ets o TENS de ser "A" o "B". Per a aquest tipus de pensament distorsionat, no existeixen els matisos, sinó que per als que pensen així, tot o veuen en "blanc o negre". 

Per cert... 

Hi ha un llibre, també vídeo del meu estimat Foucault, que pot ajudar a mirar, és breu i val la pena el recomano amb independència de les vostres opinions i conviccions, totes respectables...! 

La meva d´opinió, la reservo de moment, però quedi molt clar que no coincideix 100% amb cap d'aquestes vostres, i se´n pot fer un llibre; la del Foucault té més punts a favor, per mi...hahahaha

Gràcies per la teva opinió Ana!

El vídeo: https://youtu.be/PtmU3_Gz1Rg

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RespostaElimina la visualització prèvia43 minutsEditat
Ana Martin Carmona D'acord! Ara no tinc temps de veure el vídeo, però vull insistir en què el que fa aquesta gent, no és expressar una opinió, sinó una ideologia molt concreta i a més, perillosa, i aquí és on rau la qüestió per mi. I a més, estic segura que en Foucault també es manifestaria en contra, apa!!
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16h
David Paraire Brugués Ideologia d'alliberació uns, i ideologies d'opressió altres; l´objecte real (percepció) i l´objecte intencional (tendència)  potser? La famosa frase de la fenomenologia de Husserl, i que va inspirar a J. Derrida. És: “La necessitat de que tot objecte ideal té de ser expressat al món”, trobo jo, que aquí va que ni pintada... En definitiva, és el què J. Derrida va anomenar: "El doble parany". Clavat... Hahahaha
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Resposta15hEditat
David Paraire Brugués I jo també, clar, però és una aporia en sentit que defensar un dret no ha pas d'eliminar l'altre; és evident, Foucault donaria el seu suport en la solidaritat de base; però no es deixaria pas manipular sectària-ment i perdre un dret per lluitar de manera absurda, i en perill de negació pel fet d'excloure els altres drets, el de la llibertat d'opinar, d'expressar, de dissentir, de pensar diferent. 

És clar, representa un excedir-se en la normalització (NORMA), una perversió totalitzadora del dret de les persones com a individus diferents; iguals sí, però al mateix temps cal donar valor a totes les diferències (fins i tot a les d'opinió o ideologia); és doncs, un mal ús del reivindicar "igualtat" quan aquesta ha de tenir el sentit d'equitat, però no pas d'una uniformització cultural logocentrica i dispositiva com a discurs únic. Les ideologies en general, amb els seus productes negatius com les pors i el rebuig, i que no han estat expressades per la paraula, sempre es transformen en odi i/o fins i tot violència, contra al que s'aparta del considerat canònic en la societat, i de la correcció política. En tota regla és una paradoxa de la llibertat com a fenomen, i és també des del punt de vista d'una ètica errada, reivindicada en fals i desequilibrada en dret i manca de responsabilitat. Foucault com a bon investigador de la fenomenologia, coneixia el fet de l'antinòmia, que produeix els signes negatius com a fenòmens actius parcials, i que consisteix a afavorir precisament allò mateix contra el que és lluita, les conseqüències i les implicacions són automàtics en l'esdevenir social. És per això que ell sentia justificadament cert recel per aquesta ceguesa, la seva visió era  donada des de  la lògica de la fenomenologia, i va veure que per part d'alguns grups d'alliberament social, la exaltació lluitadora era per ell comprovada, i amb cert comportament de distorsió fanàtica, contraproduent pels fins mateixos de la mateixa ideologia de gènere.(Phénoménologie). Anàlisi existencial. La formació universitària de Foucault va estar impregnada de fenomenologia. En Dits et écrits són nombroses les referències a la presència i influència de la fenomenologia durant els seus estudis.  I, no desconeixia pas que la ideologia de gènere crea el propi mecanisme tecnològic d'antítesi social activa... I, la seva postura (La de Foucault) va ser molt cuidadosa sempre...

"Michel Foucault va venir a dir que la història és un "continu" de pràctiques repressives realitzades a través d'institucions creades pel poder per controlar i dirigir la societat. Tals institucions són el manicomi, la presó, o la sexualitat. Per a ell, "el sexe és una cosa que hi ha hagut sempre" (...); el que és una invenció recent és la sexualitat, que en la seva opinió apareix al segle XVIII i s'ha d'entendre com el conjunt de (pràctiques, sobreentesos, paraules, mirades, normes, regles i discursos relacionats amb el desig, la genitalitat, etc.)  Foucault rebutja la tesi de la repressió perquè, segons la seva opinió, "tot i que el discurs sigui repressor, produeix materialitats: exacerba el desig". (...) En conclusió, al poder li interessa que hi hagi desig exacerbat i hi hagi delictes, per seguir mantenint-se en la posició de domini sobre els cossos; tot això és el que ell en diu (l'astúcia del poder).".

Foucault no va estar mai a favor o en contra, d'acord o desacord. Ell va defensar l'individu fora del poder normatiu (el de veritat absoluta) d'una societat normalitzadora sobre els cossos (perfomance com a antidisciplina) en especial precisament del sexe i gènere i identitat, per part de les institucions i l'aplicació de poder. D'aquí la implicació en defensa dels col·lectius minoritaris i exclosos. I, mai ho va fer dicotòmica-ment, i mai amb el mateix discurs pre-fabricat d'uns o altres per manipular-nos i dominar-nos, i ho explica molt bé. Ell mai va voler ensenyar quina era la veritat, però ell va ensenyar molts camins per poder trobar-la, aquesta multiforme veritat. No? hahahaha 
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Resposta4 minutsEditat
Merce Martinez Caro David el que he escrrit es el que sento, no soc tant tecnica no intelectual com tu, pero aquets personatges en fan repelus pel que poden fer. I a part no en mereixen cap respecte.
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1
14h
David Paraire Brugués Els sentiments son molt importants, Merce, i  fas molt bé de fer cas d'ells. Ells neixen sovint de la intuïció, la teva ja és veu, i té molt bona salut, sembla. I la realitat individual és el què un viu, veu i sent. El saber de la pròpia realitat és quelcom individual. "El respecte és un valor ètic o moral que reconeix que una persona o quelcom té vàlua. Va més enllà de la tolerància perquè implica també un sentiment", encara que sigui positiu o negatiu cap a l'altre.

"Per a alguns, el respecte positiu en les relacions interpersonals comença pel reconeixement de l'individu com a entitat única i que necessita ser comprès per l'altre. Consisteix a saber valorar els interessos i necessitats dels altres".

No penso però amb el respecte a les persones en dicotomia de positiu o negatiu, simplement, més aviat, trobo que és del grau de respecte que sentim segons la nostra percepció de l’empatia de l'alteritat. Per això segurament pensem què és millor el respecte a les persones que estimem, o pels que sentim certa afinitat; ja siguin: parella, familiars, amics , companys, fins i tot desconeguts, però que també senten per nosaltres el mateix respecte que nosaltres els oferim a ells. Aquest ésel terreny on coincidim amb els altres. És el fenomen social de la identificació i de reconèixer-nos part d'un grup
. La identitat.

O sigui Merce, si vols la meva opinió sobre el que dius del respecte o dels sentiments. Jo penso què és natural, i encertes plenament...!

Tots sabem el que tenim entre-cames, i no cal que ho diguin altres per informar o desinformar-nos. Però si ho volen dir, que diguin, que diguin... no?

Una cosa és un Dret molt important com és la llibertat d'expressió.
Una cosa diferent i indispensable el Dret a la llibertat de pensament.
I, un dels  sagrats també és per mi, el Dret a la llibertat: "dels sentiments"...

ABRAÇADES Merce Martinez Caro!
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Resposta28 minutsEditat
Merce Martinez Caro Molt be David. De qui es l'escrit,
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1
13h
David Paraire Brugués Meu, exeptuant la definició de respecte, aquesta l'he anat a trobar a la Wikipedia! https://ca.wikipedia.org/wiki/Respecte

El respecte és un valor ètic o moral que reconeix que una persona o quelcom té vàlua. Va més enllà de la tolerància perquè implica un sentiment positiu cap a l'altre.
CA.WIKIPEDIA.ORG
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13hEditat





Marc Puig Pérez
‪Orgull de Govern que envia cap a casa el bus #hazteoir sense missatges 👏👏👏👏
Bona feina Dolors Bassa 👏✊🏾🔝

Comentaris
David Paraire Brugués La bona intenció era evident. Però el desastre és inimaginable. No saben el que han fet i el seu significat. Irresponsables. Aparentment ha guanyat la política de llibertat. Però no, és una paradoxa imperceptible, és tot el contrari. Ho lamento profundament. Sí, tenim un enemic invisible. I, aquesta ceguesa fa i farà molt de mal! 
"Aldous Huxley va publicar 'Un món feliç' el 1931, en plena depressió econòmica, en una època d'inquietud i incertesa. El llibre era una fantasia científica. Era també un quadre de malson. Reflectia una evolució regressiva de la humanitat, la culminació de set segles d'errors, la societat tal com podria ser 'al segle VII de l'era de Ford'. Transcorregudes menys de tres dècades des de la publicació d'aquest llibre, l'il·lustre escriptor britànic va advertir amb amargor que moltes de les seves imaginades truculències es convertien en penoses realitats amb una rapidesa que no havia pogut somiar. Segons Huxley, la llibertat individual està en perill al món sencer. Poderoses forces impersonals empenyen cap a un "totalitarisme" molt poc humà, tot apunta en la mateixa direcció. "El punt clau de caràcter moral del llibre gira al voltant de dos problemes diametralment oposats. El primer, i el més obvi, és que per assegurar una felicitat contínua i universal, la societat ha de ser manipulada, la llibertat d'elecció i expressió s'ha de reduir, i s'ha d'inhibir l'exercici intel·lectual i l'expressió emocional. Els ciutadans són feliços, però John el Salvatge considera que aquesta felicitat és artificial i «sense ànima». En una escena crucial discuteix amb un altre personatge, l'Interventor Mundial d'Europa Occidental Mustafá Mond, sobre el fet que el dolor i l'angoixa són part tan necessària de la vida com l'alegria, i que sense ells, posant-ho en perspectiva, l'alegria perd tot significat.
El segon problema presentat en la novel·la és que la llibertat d'elecció, la inhibició de l'expressió emocional i la recerca d'idees intel·lectuals resulten en l'absència de la felicitat."
Huxley sosté en aquest lúcid llibre que ha d'iniciar-se sense demora l'educació per a la llibertat. No està molt segur que la llibertat triomfi, però estima que lluitar per ella és el deure de tot home conscient".
Alina Vallmajó Alpañez Interessant com sempre la teva opinió. Haurem de desenvolupar-la... fins quan vulguis, avui tinc feina. Petons.
David Paraire Brugués Jo també! Però es permet el meu comentari no? Només puntualitzar, no és la opinió. És la ètica!
David Paraire Brugués La meva opinió és d'acord, la meva ètica no. Però... Molts no distingeixen opinió i ètica, i per això la llibertat no ha guanyat. Ara explica-ho i que t'entenguin Hahahaha PETONS!

Algú ja no recorda la seva lluita contra la llei mordassa! Hahahaha
Alina Vallmajó Alpañez Sí t'entenc...i és molt difícil, per a mí, saber on són els llindars de la llibertat de cadascú...PETONS!
Alina Vallmajó Alpañez Ja veus que llenço pilotes fora...t'he entès perfectament. Que quedi entre tu i jo. Hehrhe!
David Paraire Brugués Doncs mira quan no tinguis tanta feina, potser el meu amic Foucault la pot ampliar amb una nova visió insospitada (i, va d´aquest tema), amb nous llindars, els teus, els meus, i els de moltes altres persones. Tot sigui per la llibertat individual. És només una recomanació. Però ets, i som lliures; o, això pensem! ABRAÇADES. Mira: https://www.facebook.com/davidparaire/posts/10212620008117440?notif_t=like&notif_id=1489755932542154
Alina Vallmajó Alpañez En veure el teu post ho he entès millor...
David Paraire Brugués Aix... Perdoneu era un error hahahaha Què ets vist? hahahaha
Alina Vallmajó Alpañez Carai quin debat que heu tingut...! Estic més d'acord amb l'Anna Martí...
David Paraire Brugués El què he vingut a dir jo en el privat per si o volen saber altres, Foucault que era precisament homosexual , y un inspirador de la Teoria Queer. Però ell té una visió molt particular de la llibertat individual, i va fer una distinció molt interessant de "sexe" versus "sexualitat" i al mateix temps, ho combina amb les implicación i diferencia de les certes estructures culturals i de la hipótesis represiva de la subjectivitat "Llibertats tingudes per naturals", i el "coneixement" versus "poder". Per no confondre-ho el resultat és molt alliberador i lògic, trobo que és un mestre i jo l´admiro. Ja ho sabeu però... Foucault com he dit, és un dels principals inspiradors de l'anomenada "teoria queer". Malgrat la seva desconfiança per les polítiques d'afirmació gais i lesbianes. Pel tema de la "NORMALITZACIÓ" com aquesta d'anar contra l'autocar, és un exemple aplicat a la seva lliçó...
Resposta14hEditat
David Paraire Brugués Jo no estic precisament en desacord amb l´Ana Martin Carmona amb mi tampoc ho va fer crec, però és fácil saber-ho si ara ho vol dir ... (¿?) -No hi ha pas una oposició d´opinió per la meva part a cap opinió, és ètica, si hom opina no pot pas valorar, ètica és un discurs diferent a la ideologia o a la política, i no acceptar ètica en política o ideología per por o dogmatisme és simptomàtic de totalitarisme. O de considerarse infal·lible. Ètica és un valorar, un contrastar valors críticament i constructivament. Es fa mitjançant precisament d'avegades amb la desconstrucció com eina, i de l'explicació en les múltiples cares de significats possibles d'un relat, i les paradoxes, etc. Tot per analitzar-lo però no pas destruir-lo, aquest no és mai l'objectiu d'aquesta dialèctica. Però la gent no distingeix ètica d'opinió. Tots tan acostumats a consumir opinió ideològica, i de manera binària, és el nostra problema "la manca de consciencia d´avui"... hahahaha
Resposta11hEditat
David Paraire Brugués Ja t´he dit que no és un tema d´opinió, és ètica. I ella, l'Ana no diu estar en desacord amb mi, almenys de moment. Ella diu estar en desacord amb el Savater, i jo he reservat la meva opinó. Les he trobat interessants totes. Però jo, com a objectiu he fer notar una paradoxa de la llibertat, és veure una perspectiva amagada, però igualment certa... Espero que molts l'hagin volgut veure!
Resposta10hEditat
Alina Vallmajó Alpañez Per cert, el video d la xerrrada no el sento bé...
David Paraire Brugués Quin, el del profe de la Fonda Filosófica, que parla de la teoria del Foucault sobre aquestes coses? https://www.youtube.com/watch?v=PtmU3_Gz1Rg
David Paraire Brugués Ah aquest és un altre tema, també molt interessant, però és cert té algun problema d´audio... Jo trobo millor el del Foucault però...
Alina Vallmajó Alpañez Ho miraré tot. Reprendrem tema. Ciao!
David Paraire Brugués Sí. Fins un altre moment!

David Paraire Brugués Mireu, ja comença: les primeres conseqüències en contra de Catalunya, i en contra de la ideología de gènere. Una fantàstica propaganda. Genial el guanyat, també miren fora d'Espanya. Les declaracions que volien, sucoses a més no poder, per fer-nos mal en un moment delicat del procés, i servits en safata, i de manera innecessària. Molt bona feina, sí...
https://m.facebook.com/story.php...
Alina Vallmajó Alpañez Ja hi estem acostumats... per cert, feliç aniversari! Que tinguis una feliç diada. Petons.
David Paraire Brugués Moltes gràcies per la felicitació. Abraçades!
David Paraire Brugués No és bona senyal acostumar-nos a les conseqüències dels possibles errors. Millor és aprendre, per evitar errors i les seves conseqüències! 

http://carrasclest.blogspot.com.es/2017/03/cortina-2014-que-es-y-para-que-sirve-la.html?spref=tw

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